Respetuosamente a quienes por una u otra razón tuvieron que dejar su tierra natal:

Estimados familiares y amigos de Facebook, mi nombre no es relevante pero si puedo decir que soy de Suchil. Soy suchilense y a través de mi existencia me he relacionado con personas de diferente credo, ideología y personalidad.

Puedo decir que todos han sido muy respetuosos pero tienen algo en común: cuestionar el porqué de mi trasnochado capricho a hablar con tanta asiduidad y afán acerca de ese noble pueblo; esa añorada tierra que como una madre un día escuchó el adiós de cada uno de sus hijos sabiendo que algunos de ellos jamás volverán.

Será acaso necesario explicar que el alma igual que la retina de los ojos lleva en su interior la bella óptica de aquellas sublimes épocas porque el alma misma es la retina que proyecta los sentimientos del corazón?

Apreciable lector, cuando usted se encuentra ausente de su casa en su memoria no palpitan las débiles palabras de sus padres, hermanos o amigos deseándole “feliz viaje”? En el silencio de la noche alguna vez no le pareció escuchar con claridad nítida y al mismo tiempo estremecedora el ladrido del perro de la casa,el cántico de un gallo o las campanadas de la iglesia? No se ha dado cuenta que cuando la tristeza y la nostalgia golpean el alma, el entusiasmo falta y en vez de toda poesía, de toda emoción, de toda impresión no se vislumbra en el recuerdo sino el objeto añorado?

Flavio Hernández S

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